jueves, 15 de abril de 2010

La resistencia de la alegría


Reunión bandística, conversación agitada con tonitos molestosos, que si dejamos de laburar para venir, que si ensayamos, que si nos miramos torcido, que que que.

A mí se me ocurre preguntar (aunque nunca nadie logre entender de qué demonios estoy hablando y por qué me descuelgo con cosas sin sentido.. ilusos)
"A ver, muchachos... ¿por qué venimos? ¿por qué lo estamos haciendo? ¿cuál es el motivo que mueve a cada uno?"

Un par me miraron extrañados. Ninguno me contestó.

Ninguno tuvo la honestidad suficiente para poner arriba de la mesa todo abierto ahí, su corazón.

¿Es porque querés hacer recitales y discos a lo perro?
¿Porque querés tener el poder absoluto para deglutir minitas previamente seleccionadas desde un escenario?
¿Porque querés que los vecinos te quieran y toleren con tal de salir de refilón en las fotos de Paparazzi?
¿Porque querés tener una buena excusa una vez por semana para huir de una casa a donde no soportás volver?
¿Porque, aunque no soportás a ninguno, tenés miedo de que la peguen y vos haberte quedado al margen como un boludo?
¿Porque da chapa tocar cerca de alguno?

Alguien dijo en medio de la charla "parecemos una banda que toca hace treinta años y ya no se aguantan.."
Mientras dialogan, doy un paso adentro y los miro otra vez. Pienso en que no me divierte porque para ellos no es divertido. Vienen a trabajar.

Pienso en esa cualidad de los adultos de convertirlo todo en un padecer.

Pienso en que el adulto no pierde el tiempo porque sí, no hace algo por hacer, no puede permitirse dar puntada sin hilo.

Pienso en cómo me gusta ver en un espectáculo ese momento en que los actuantes se hacen cómplices y se tientan, o se miran a los ojos cantando esas líneas con una complicidad que los hace disfrutar, sacando sus sonidos en un círculo ritual del que los demás somos expectantes.

Pienso en cómo me gusta ver al otro disfrutar, porque el disfrute es lo contagioso.

"Nadie le permite a sus hijos bailar, cantar, gritar y saltar. Por razones triviales -quizás pueden romper algo, quizás se les moje la ropa con la lluvia si corren en el exterior-, por pequeñas cosas se destruye por completo una gran cualidad espiritual: la alegría. El niño obediente es elogiado por sus padres, por sus profesores, por todo el mundo, y el niño juguetón es censurado. Sus ganas de jugar podrían ser totalmente inofensivas, pero es censurado porque existe un peligro potencial de rebelión. Si el niño continua creciendo con total libertad para ser juguetón, acabará siendo un rebelde. No será fácilmente esclavizado; no le podrán reclutar fácilmente en un ejército para destruir gente, o para que le destruyan. El niño rebelde se convertirá en un joven rebelde. Entonces no podrás obligarle a que se case; no podrás obligarle a aceptar un determinado empleo; no se le podrá obligar a satisfacer los deseos incompletos, y los anhelos de sus padres. La juventud rebelde seguirá su propio camino. Vivirá su propia su vida de acuerdo a sus deseos más íntimos, no de acuerdo a los ideales de otra persona. Por todas estas razones, se sofoca su capacidad de jugar, se aplasta desde el principio." (El libro del niño, "The Rebellious Spirit, Capítulo #17", Osho)

Lo hago porque está bueno jugar todos los martes a saltar y correr por un escenario como cuando cantaba en deshabillé adelante del espejo con un micrófono de envase de talco y los gestos de Liza Minelli. Y con una clara sensación de libertad en el alma de decidir no hacerlo más el día que el juego ya no esté bueno y ya no sea un juego. Porque lo menos importante de todo es lo que va a pasar. Lo que pasa cada vez es lo fundamental.

Ey, muchachos, basta de hacer de cada cosa un padecimiento, un laburo gris de oficina. Basta de llegar puteando, hacer puteando y partir puteando para seguir puteando después.
Basta de vivir siempre para la posteridad olvidando que la posteridad y el futuro se hacen de millones de día a día.

Basta de esa rara manía de tomarnos tan en serio, de creer que somos tan importantes, y vivir ofendidos, y criticar, y denostar.

Dejame iluminarte, muchacho, chiquita, con una frase contundente y clarita:
La vida es más simple. No la compliques.

10 comentarios:

  1. La vida es simple y la posteridad se hace día a día...¡ qué verdades!
    Carpe diem.



    (Y si que sabemos de que hablas desde varios post atrás. Al menos, eso creo. Pero,¿sabes? los chicos tardan más en madurar y en saber qué quieren.)

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  2. Benditayani, jipis o no jipis, somos una sociedad que está padeciendo el posmodernismo; estamos todos enojados, chinchudos como la divina de Iansá, todo es urgente, todo vence. Y una putea, vaya si lo hace.
    Todavía resuena en mi tímpano ese "venite, agarrá unas masas y sacate eso que te tiene mal, empezá bien la semana", charla telefónica dominguera con voz angustiosa mediante. Y debo decir que tenés razón. Que no hay que perder el disfrute por lo que supuestamente uno ama hacer y prioriza, frente a sus otras "responsabilidades de adulto". Ya para amargarnos, tenemos todo lo que el sistema quiere que nos amargue y que nos acostumbremos a vivir con eso.
    Y esto de lo que hablás es justamente otra cosa, salir de la vorágine occidental, hacer lo que a uno le gusta, disfrutarlo y no padecerlo. Vivir simple es más fácil que retorcerse, pero es un laburo que hay que hacer día a día con una misma, reconocerse como persona, con todo lo que eso implica, con las verdades que una se topa. A mi me cuesta, pero lo intento. Es cuestión de hacer ese laburito y ayudarse mutuamente con gente que crea también que vivir así es posible, más allá de cualquier mambo interno. Sólo así, vas a ver que van a empezar a salir a flote colectivamente las cosas más bellas y a disfrutar de ellas.
    Abrazo, Ale.

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  3. ou yeaaaaaah!!! tu puedes con ellos!! malditos jipis....
    te quiero!
    la panza danzante (aun...)

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  4. Ninguno tuvo la honestidad suficiente para poner arriba de la mesa todo abierto ahí, su corazón..

    yani


    ninguno la tiene ...la verdad molesta y la sinceridad tambien ..por eso yo
    NO ME CALLO-

    TURCA

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  5. me parece que cuando yani dice ninguno tuvo la honestidad, se refiere justamente a eso ninguno, A veces es necesario callar para aprender a escuchar, a veces es necesario callar para sentir, a veces es necesario callar para ayudar y aprobar, no siempre hay que decir.....no callarse no significa siempre ser sincero siempre, no callarse nada termina siendo el mecanismo cómodo de los que creen ser Sinceros y solo utilizan el no callar como una maldita forma de escupir mierda y desparramarla sin sentido.
    Apoyo al disfrute y la vida simple
    Besos
    Gra

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  6. Tu pregunta quedó suspendida en el aire no porque ninguno supiera la respuesta o por falta de honestidad, sino que parecía más urgente sacarse el muerto de encima con algún punto de partida más tangible.
    Las razones por las que se están o no podrían ser tema de la próxima ronda (todo a su momento). A veces no hay que saberlo todo (a veces mejor no saber nada).

    PD: yo conté porqué estaba ahí antes que nadie, y vos no me escuchaste.

    PD2: porque me fui de casa a tocar rocanrol y no volví nunca más.

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  7. Uno nunca va a saberlo todo. Gracias si logra saber lo propio (y sabemos que con uno, nunca se sabe..)

    A lo mejor deberíamos dejar de hablar y poner el cuerpo y el alma en hacer y dejar un poco a la cabeza mudita. Hay que hacer un poco de silencio y espacio para dejar que este experimento de banda sea.

    PD: Alguien le dijo que cuando afloja su esfínter y se pone jodón usted es un muchacho brillante y encantador?

    PD2: Si, escucho. Pero, contagiada por el síndrome de Buira, olvido. Así siempre hay conmigo tema de conversación..

    PD3: Quiérame así. Es lo que hay.

    PD4: (pero no me va a decir que no soy encantadora..)

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  8. Hay que veces que pareciera que decir lo que uno piensa es pecado. Que las miradas se agolparan para castigar la desobediencia.

    Nada más cercano a la realidad que reconocer que uno nunca lo sabrá todo, ni por asomo. Pero hay veces que con tal de no transpirar la camiseta por el amor a tal, y dejar todo, muchos se bajan del barco antes de que zarpe.

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  9. No hacer de cada momento un tango... esta historia ya parece "Tomo y Obligo", donde Ella es la música como arte (y no harte)...
    Me gusta cuando cada uno hace lo bello que hace en esa banda, y no hace ni resignifica nada más... suena tan lindo.

    Wailer chú.

    Pd. Usted es encantadora.

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  10. ok..esta bueno callar para escuchar ...

    cri cri cri cri ---che yyy? ...cambiamos el mate ---


    el que habla para qué habla el q opina pra qué opina , el que siente para qué siente .?

    (PROPUESTA DE REUÑIONETA ,charla terapeutica , etc etc
    )
    para decir lo q se piensa ..lo que le parece tal o cual cosa ..porque estamos grandes para poder hablar ,y aclarar si algo no parece claro ..porque esta bueno poder cambiar entre todos alguna cuestion..


    entre todos ? --cri cri --che y el mate ?

    la musica no es para impresionar , si no para conmover !!!

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